28 noviembre 2012

EN TRANSPARENCIA HAY QUE ASPIRAR A LA EXCELENCIA

Transparencia Internacional España ha puesto nota a Baleares en materia de transparencia: un notable. Para obtener esta puntuación, exactamente un 83,8, se han examinado 80 indicadores que van desde las relaciones de la Administración con los ciudadanos, pasando por la transparencia económico-financiera, la contratación de servicios y suministros, hasta la transparencia en el urbanismo y las obras públicas. Como no podemos contentarnos con un 9 ya que debiéramos ser alumnos que aspiran a la excelencia en todas las materias, nos vemos obligados a reflexionar en qué fallamos para que nos puntúen con un sobresaliente.
 
Según el indicador nº 52 de los 80 evaluados, se establece como no disponible la publicación de los indicadores de eficiencia o eficacia en el gasto en la prestación de los servicios públicos por parte de la Comunidad Autónoma, en función de lo que indican los presupuestos. Esto significa que no se publican estos datos porque igual al leerlos nos daba un ataque al corazón al ver cómo se malgasta el dinero de nuestros impuestos y los niveles de ineficiencia de los servicios públicos. Este es el único indicador que ni siquiera está disponible y no hay ni planes para implementarlo. ¡Un cero patatero!

Los otros diez indicadores en los que Baleares necesita mejorar van desde la aprobación y publicación de planes estratégicos, la publicación de los anteproyectos legislativos autonómicos, la posibilidad de realizar la mayoría de las tramitaciones administrativas en línea, la existencia de un Síndic de Greuges (un órgano previsto en el Estatut de Autonomia que nadie nunca ha tenido el más mínimo interés en crear), o la existencia de un mecanismo seguro para denunciar posibles conductas fraudulentas, corruptas o poco éticas cometidas por los cargos públicos o el personal de la Administración. Casi nada.

Llama la atención que uno de los indicadores que son objeto de evaluación –y obtiene un aprobado– es la publicación y puesta a disposición de la ciudadanía –reitero, puesta a disposición de la ciudadanía– de la declaración de actividades de los altos cargos de la CAIB. Actualmente existe un Registro de Intereses y Actividades y un Registro de Patrimonio de los miembros del Govern y altos cargos que depende de la Secretaría General de la Conselleria de Presidència, pero solo facilita notas de registro. ¿No podrían estar las declaraciones colgadas en la página web? ¿No se trata de establecer la máxima transparencia?

En esto, como en otras muchas cosas, hay terreno para avanzar. Pero ¿hay voluntad política de hacerlo? ¿Por qué los ciudadanos tenemos derecho a conocer la declaración de intereses, actividades y patrimonio de los diputados y senadores y sin embargo, nos está vetada esta información de los diputados autonómicos, el Govern y todos los altos cargos? Incomprensible.

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