En cualquier país normal, si se pilla a un político en una
mentira y mucho más si esa mentira se refiere a una cuestión de dinero público
y el engaño lo pone de manifiesto y certifica el más alto órgano judicial del
territorio, el político en cuestión es obligado a irse a su casa con las orejas
gachas y el rabo entre las piernas. Sin embargo en España es diferente y aquí
el embustero saca pecho y chulea, anunciando que recurrirá con los abogados que
pagamos todos.
Recién llegado a la presidencia del Govern, José Ramón Bauzá
realizó una reestructuración del gabinete del presidente en junio de 2011 que,
si bien reducía el número de cargos de confianza de forma importante, suponía
aumentos salariales que oscilaban entre un 8 y un 21% al personal del círculo
más estrecho de sus colaboradores. Y ello mientras el sueldo de los
funcionarios estaba congelado y anulada una paga extraordinaria.
En una entrevista que el president concedió a Televisión de
Manacor en noviembre de 2011, en la cual tuve el gusto de participar, se le
preguntó por la cuestión que él negó categórico diciendo que la subida era “cero”.
Entonces se escudó que el montante de la reestructuración suponía un ahorro con
respecto al gabinete de su antecesor. Sin embargo, se le escapó la siguiente
frase: “Ha habido unas pequeñas modificaciones, alguna subidita o así…”.
En el plató de Canal 4 televisió el 19 de junio de 2012,
respondiendo a las preguntas de Beatriz Díez Mayans, afirmó: “No nos hemos
subido ni un céntimo de euro ninguna de las personas de mi gabinete de
presidencia, ni uno. Y lo digo con esta contundencia porque animo a una sola
persona a que diga lo contrario. Se está manipulando, se está tergiversando la
realidad y se está falseando la realidad de los hechos. Ni una sola persona de
mi gabinete se ha subido el sueldo”. Con esta rotundidad se expresó Bauzá a
pesar de que en el mes de marzo el TSJB suspendió cautelarmente el
controvertido aumento salarial decidido por el Consell de Govern el 22 de junio
de 2011. Conviene recordar que el Govern recurrió la suspensión cautelar y su
recurso fue desestimado, condenando a la administración recurrente a pagar las
costas del recurso, que obviamente pagamos todos.
Un año más tarde, el 17 de julio de 2013, en una nueva entrevista
concedida a Canal 4 televisió, Bauzá atacó despiadadamente y con gran
arrogancia a la periodista y le reprochó visiblemente enfadado: “Esta pregunta
me la hizo usted en la anterior entrevista y le dije lo mismo que le diré
ahora, usted está diciendo una cosa como si fuera una verdad real y usted a
sabiendas sabe que lo que me está diciendo no es cierto. Y usted lo sabe y yo
se lo dije, yo se lo expliqué y lo entendió. Da por hecho una cosa que no es
cierta”. Beatriz Díez le preguntó: “¿qué es lo que no es cierto, presidente,
que el tribunal ha suspendido la subida de sueldo?”. Y él respondió: “No es
cierta la subida de sueldos. Yo se lo expliqué y se lo volveré a explicar. Lo
que se hizo simplemente es cambiar de categorías”. La periodista insistió en la
suspensión cautelar por parte del Tribunal Superior de Justicia de Baleares y
Bauzá, en el colmo de la desfachatez, mintiendo como solo los embaucadores más
experimentados saben hacerlo, respondió: “lo que ha dicho es que queda anulada
hasta que haya una sentencia, que no es lo mismo que queda suspendida”. Beatriz
Díez insistió: “suspendida hasta que haya una sentencia”. Y el presidente
replicó “pero es que no es lo mismo, si hay una sentencia ya lo veremos, hasta
la fecha, momentáneamente, cautelarmente…”. Y terminó con este reproche a la
entrevistadora: “usted lo sabe y lo vuelve a preguntar para hacer de un hecho
que no es real, una realidad absoluta. ¡Usted lo sabe!”.
Bauzá acusó a Beatriz Díez Mayans de mentir a sabiendas. Pues
bien, ya tenemos aquí la sentencia del TSJB que califica de “despropósito”,
“discriminación arbitraria” y “contrario a derecho” el acuerdo del Consell de
Govern de 22 de junio de 2011, que aprobó la modificación de la relación de
puestos de trabajo del personal eventual del gabinete del presidente. Bauzá
reclamaba una sola persona que afirmase que había aumento de sueldo. Aquí la
tiene. Y no una, sino tres: los magistrados de la sala
contencioso-administrativa del Tribunal Superior de Justicia de Baleares
Gabriel Fiol Gomila, Pablo Delfont Maza y Carmen Frigola Castillón. En su
sentencia afirman: “resulta un despropósito que, mientras a todos los empleados
públicos se les rebaja el sueldo y se les exige un sacrificio, a los empleados
eventuales (…) desde su comienzo se les retribuya con unos emolumentos
superiores a los que recibían los empleados eventuales del anterior Govern”.
También argumentan que “no es admisible aplicar un criterio distinto en el
aspecto retributivo a un colectivo de personal al servicio de la misma Administración”.
Y “En tiempos de crisis, cuando se exige a toda la sociedad un sacrificio
personal, la transparencia y la ejemplaridad en la actuación de cualquier
gestor deviene fundamental”.
Los miembros del gabinete del presidente Bauzá afectados
deberán devolver las retribuciones indebidamente percibidas. Pero para evitarlo
el Govern en boca del vicepresidente Antonio Gómez, en un nuevo ejemplo de su
arrogancia, ha anunciado que “seguramente” van a recurrir, lo cual incrementará
aún más el coste de la ilegal medida adoptada en su día y la decisión de
recurrir los sucesivos varapalos judiciales en beneficio de sus colaboradores.
Si tuvieran que pagar ellos de su bolsillo las costas, seguro que no recurriría.
Como pagamos todos, ¡adelante! Pero queda muy claro ahora que quien mintió fue
Bauzá, no Beatriz Díez. Y lo hizo con un descaro y con una desvergüenza
escalofriantes. Lo hizo en televisión, en directo y ante todos los ciudadanos
de Baleares, que pudieron verlo en sus casas. Pero da igual porque como se
espera de un ser superior, pagado de sí mismo y situado por encima del bien y
del mal, prepotente hasta límites insospechados, no reconocerá su error. Ahora
acusarán de mentir a los jueces del TSJB. Por eso recurrirán.