23 septiembre 2008

Clandestinos

Hace algunos días ví la película 'Clandestinos' de Antonio Henz. Aún recuerdo la agria y desmedida polémica que suscitó la publicación por parte de Zero de uno de los carteles promocionales de la película (había varios), concretamente este:


Sin entrar en valorar el buen gusto o lo acertado del polémico cartel, pues eso queda al albur de la opinión de cada cual, lo cierto es que había más carteles promocionales del film:



Recuerdo que a finales de marzo de este año, algunos compañeros responsables provinciales de AUGC, se escandalizaron por el cartel promocional del film y siguiendo la estela de ‘Unión, Progreso y Democracia’, y otras organizaciones como ‘Hazte oír’, exigieron ofendidísimos que la Asociación estudiara la viabilidad de interponer acciones legales contra Zero por haber publicado la fotografía, nada menos que por hacer ¡apología del terrorismo!.

Sin haber visto la película y opinando de oídas, la calificaron de "aberración", "ignominia", "atentado", "vergüenza", "bazofia inmunda"... repito: sin haberla visto. Entonces, envié un correo a toda la organización de la que entonces era Secretario General, tratando de aplacar los nervios, aunque no sé si lo conseguí, pues reconozco que nunca ha sido mi especialidad: “¿Os parece correcto utilizar a la Asociación para defender planteamientos de supuesta indignación personal? A mi no me lo parece y considero que se hace el ridículo personalmente y ya de paso, se coloca en esa penosa situación a la organización. He visto el trailer en www.clandestinos.es y no veo nada injurioso para los guardias civiles...”.

Hablé de la libertad de prensa y dije que la revista Zero se había limitado a hacer una crítica cinematográfica del aludido film y a reproducir el controvertido cartel. Pero daba igual, porque muchos de los exaltados y sobreactuadamente ofendidos hablaban de oído, casi por boca de otros, y sin haber visto la película ni mucho menos haber leído la revista Zero ni su crítica. Sugerí que dado que el periódico El Mundo también publicó el día 27 de marzo la misma fotografía que Zero, nos querelláramos contra ellos. Pero no les pareció lo mismo…

Lo peor de todo es que entonces me pregunté en voz alta: si no hubiera el tricornio en esa foto ¿os pronunciaríais así? Y si en lugar de empuñar la pistola un tío, lo hiciera una tía, ¿habría polémica? Y argumenté: “En este país hay libertad para que cada cual oriente su creación artística hacia donde quiera y percibo un tufo inquisitorial y por qué no decirlo, también homófobo, de ciertas manifestaciones que estoy leyendo que considero mi derecho expresarlo con el mayor respeto. Id a ver la película y después podréis hablar con conocimiento de causa. Mientras tanto, os sugiero que apagueis las hogueras o que al menos, dejéis a AUGC alejada de planteamientos más propios de Torquemada. ¡Qué lastima ver a AUGC haciendo el ridículo papel de defensora de la moral y de acusadora de los antiguos delitos de "injurias a la Guardia Civil"...! Si Pilar Miró levantara la cabeza...”

Hasta ahora no había tenido la oportunidad de ver la película y ahora que ya la he visto y tengo opinión propia, la emito. ¡Cuantas mentiras se han vertido contra el filme! Tantas, que hasta la propia Dirección General de la Policía y la Guardia Civil tuvo que anunciar que iba a estudiar el caso para ver si había indicios de injurias a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. Por supuesto que no los había y por eso nada se hizo, salvo el ridículo más espantoso.

La película es absolutamente inocua y a nadie ofende. Y ahora podría suscribir letra por letra la crítica publicada en Zero, pues se ajusta a la realidad por completo. Lo reproduzco a continuación:

SATIRIZANDO EL TERRORISMO

Gays de armas tomar en ‘Clandestinos’, el estreno de Antonio Hens

Basado en un antiguo proyecto de Eloy de la Iglesia

Por JORDI MINGUELL Fotos JOAN CRISOL

Xabi está dispuesto a todo por amor. Hasta a poner una bomba. Así de romántico se muestra el personaje principal de ‘Clandestinos’, de Antonio Hens. Una película estrenada en Madrid el 15 de febrero en la que la sátira, homosexualidad y política se dan la mano para hablar de algo tan serio como el terrorismo de ETA y la construcción de la identidad. Basada en una idea original de Eloy de la Iglesia (‘El diputado’, ‘El pico’), esta producción andaluza no es un ‘Días contados’ marica. Ni otra ‘Muerte de Mikel’. La película de Antonio Hens es el hijo bastardo de las provocaciones queer de Bruce La Bruce y de Gregg Arraki. En serio, ‘Clandestinos’ es broma.

Volvamos con Xabi (Israel Rodríguez). Se acaba de escapar de un centro de acogida junto a un joven mexicano y otro marroquí. Los tres deciden ir a Madrid donde Xabi se quiere encontrar con Iñaki (Luis Hostalot). Un miembro de la banda terrorista ETA al que conoció cuando se prostituía y del que adoptó el euskera, el odio hacia todo ‘lo español’ y la destreza con el manejo de las armas. Pero en Madrid, Xabi no logra contactar con Iñaki y para ganar dinero vuelve a prostituirse. Su primer cliente es Germán (Juan Luis Galiardo), un guardia civil que no tarda en darse cuenta que, tal y como reza el cartel publicitario, ‘el fanatismo entra por donde menos te lo esperas’.

El germen de ‘Clandestinos’ fue un proyecto llamado ‘Jugar con fuego’ de Eloy de la Iglesia. Cuando Eloy y Antonio Hens trabajaron juntos en el guión de ‘Los novios búlgaros’, el malogrado director le comentó su idea de hacer una película sobre el entorno abertzale. Un triángulo amoroso entre tres jóvenes radicales vascos y su progresiva deriva hacia la violencia. Un proyecto que en su momento no encontró financiación y del que Antonio tomó el testigo. Escribió el guión dándole un toque más satírico y se lo presentó a grandes productoras españolas. Ante su rotunda negativa de financiar un proyecto sobre pistoleros maricas, Antonio se decidió a producir la película junto a otras tres productoras independientes y rodarla en la provincia de Málaga.

El resultado es una incómoda sátira política que consiguió el premio al mejor actor, Israel Rodríguez, en el pasado LesGai Cine Mad y que a su paso por la sección a competición del festival de cine lesbo-gay-trans de Bilbao, Zinegoak 08, levantó ampollas por su tratamiento del entorno abertzale: ¿Frívolo?, ¿disperso?, ¿irresponsable?... Antonio se defiende: “No quería hacer una película realista. Lo que quería era hablar sobre la identidad, sobre el radicalismo y sobre España de manera satírica”. Y es que ‘Clandestinos’ hay que verla como se ve al desternillante grupo terrorista cinéfilo-petardo en el ‘Cecil B. Demented’ de John Waters. Hay mucho de mala leche lo-fi en la escena del atentado en la Plaza Colón de Madrid con una moto del Telepizza, o en ver al macho de los machos, Juan Luis Galiardo, interpretando a un guardia civil que pierde los papeles por un efebo euskaldun, o ver esa desternillante toma en la que terrorista e inadaptado se adentran enamorados en unos Pirineos que son, en realidad, la Sierra Nevada de Washington Irving.

Pero, además de satírica, ‘Clandestinos’ es una película que innova dentro del melodramático panorama cinematográfico gay español. Si en todas las películas de temática homosexual producidas en nuestro país, el homosexual es el objeto de la violencia física (‘La mala educación’, ‘Chuecatown’…) o simbólica (‘Cachorro’, ‘Segunda piel’…) en esta película los gays, ya sean etarras, filo-etarras o maderos, son los sujetos, los actores, de la violencia. Una vuelta de tuerca a las relaciones de poder que no se ha dado en la ficción cinematográfica española y que hace de ‘Clandestinos’ la primera producción hecha aquí dentro del estimulante subgénero de ‘maricas cabreados y violentos’.

Un género al que los adictos a los festivales y a la mula ya conocen de la mano del mencionado John Waters o, sobre todo, de los realizadores Bruce La Bruce o Gregg Araki. Dos directores muy distintos, estética y éticamente, pero que se interesan por igual a la polémica pregunta: ¿Qué pasaría si un gay en vez de recibir golpes, los diera? En la trilogía ‘apocalípsis teen’ de Araki (‘The Living End’, ‘The Doom Generation’ y ‘Nowhere’), seropositivos vengativos matan a policías y jóvenes descarriados, follan y matan por igual en una nihilista reivindicación de los excluidos tanto de la sociedad heterosexual como de la comunidad gay. Más política es la obra de Bruce La Bruce que con ‘The Raspberry Reich’ tocó el cielo del underground mundial, gracias al retrato porno-chic de un grupo de gays radicales que, a gritos de ‘Madonna es contrarrevolucionaria’ o ‘¡únete a la Intifada homosexual!’, intentan subvertir la sociedad heterosexual con violencia y sexo.

Con ‘Clandestinos’, Antonio Hens no pretende ser el rey del underground español a costa de ETA. Ni hacer un retrato nihilista de la juventud marginada a golpe de bombazo y referencias a Al-Qaeda. Antonio ha hecho una película con muchos defectos, pero que logra establecer un satírico juego de espejos en el que la masculinidad ibérica y la violencia terrorista son invertidas, para ver en su grandilocuente absurdidad todas sus costuras. Un juego de espejos que abre la puerta a una nueva forma de acercarse a la homosexualidad, a la política y a la identidad en el cine español. En serio, en broma.


22 septiembre 2008

Empieza el otoño

Hoy lunes día 22, a las tres de la tarde, será el equinoccio de septiembre, que es lo mismo que decir que termina el verano y damos la bienvenida al otoño, una estación gris y triste donde los días empiezan a acortarse y las horas de oscuridad superan a las de sol.

Me paro a pensar en este verano que dejamos atrás y ha sido intensísimo en muchos sentidos. No diré si bueno o malo, porque prefiero archivarlo sin más, pero quiero significar algunas cosas que han sucedido.

En primer lugar, la triste marcha para siempre de dos amigos que ya conté en este blog. También la enfermedad de un buen amigo que se está recuperando muy bien y que estoy seguro que pronto habrá dejado atrás este triste episodio de su vida que tanta angustia nos trajo en estos meses. Pero por encima de todo, quiero mencionar aquí los dos meses que he convivido con Ricardo. Debo reconocer que al principio no estaba muy convencido, pero ahora estoy muy contento de que haya estado conmigo y la verdad es que le echo mucho de menos. Me dio mucha vidilla en una época no especialmente buena de mi vida, y creo que ha sido un magnífico compañero. Me alegro de que en Barcelona la suerte se esté poniendo de su lado y deseo que sigan saliéndole las cosas bien durante mucho tiempo…

Este verano también me ha servido para darme cuenta de que siempre tengo cerca de mí a personas que me quieren muchísimo, dispuestas a apoyarme en todo momento. Me estoy refiriendo a mis padres y a mis hermanos. Siempre les agradeceré su apoyo y su entrega.



Me apetece compartir con todos vosotros una canción de Phil Cunningham que viene muy bien para este tiempo del año, titulada "When summer ends" (cuando el verano termina). Está publicada en el disco "A glint of silver" (1987), del mítico grupo escocés Silly Wizard. Es de una enorme belleza, o por lo menos a mí me lo parece, aunque parezca muy triste. Quizás sea por eso que me parece tan bella ahora. Se la dedico a Ricardo, con quien estuve escuchándola en las calas de Deiá

08 septiembre 2008

Un fin de semana en Deià

Este pasado fin de semana he estado en Deià, en la casa de un amigo que está entre el Puerto de Sóller y Llucalcari, en plena Sierra de Tramuntana, uno de los lugares más bellos de Mallorca.



Es un lugar muy especial para mí por los momentos inolvidables que pasé allí con Jose y que no visitaba desde julio del año 2005. Las vistas al mar son increíbles y el tardecer con la puesta del sol en el horizonte, constituye un espectáculo maravilloso. Como dice Santiago Rusiñol en su libro "La isla de la calma", "el sol va baixant, i baixa tant, que sembla que l'aigua el puja a rebre" (el sol va bajando, y baja tanto, que parece que el agua suba a recibirle).

Estuve allí con Jose, Carlos y Ricardo, un joven mexicano que ha estado viviendo en casa y se marcha mañana a Barcelona para seguir con sus estudios en la universidad. Estoy muy feliz de que haya pasado estos dos meses viviendo conmigo y soportándome sin la más mínima queja. ¡Ni Job tenía tanta paciencia! Le echaré mucho de menos y deseo que vuelva pronto por aquí.


Esta foto nos la hicimos el viernes pasado en la planta baja del Ayuntamiento de Palma, junto a los gigantes Tòfol i Francinaina.

Ayer domingo actuó el grupo irlandés Dervish en Palma. Me hubiese encantado ir, pero no ha sido posible. La última vez que los ví actuar en directo fue con Jose en el Teatro Principal el 10 de abril de 1997, donde además grabaron la actuación y la publicaron en un doble CD titulado 'Live in Palma'.




Ya que no pude verlos, habrá que conformarse con ver sus vídeos en Internet. Espero que vuelvan a Palma en más ocasiones, a ver si entonces tengo mejor suerte y puedo ir a verlos. Pero que sea pronto. ¡No hace falta que pasen 11 años!

01 septiembre 2008

Un poco de humor

Hoy toca algo de humor. Es de los geniales Juan Luis Cano y Guillermo Fesser (Gomaespuma).



Cuando yo estudiaba en el Instituto ya les escuchaba en Antena 3 Radio, después del programa del Dr. Beltrán, 'La salud es lo que importa'. ¡Fijaros si hace años! Recuerdo que grababa los programas para volver a oirlos más tarde. Debo tener las cintas por algún rincón y sería genial si las pudiera encontrar...

En marzo de 1990, durante el viaje de Estudios de 3º de BUP del I.B. Antonio Maura a Madrid, les llevé una ensaimada a los estudios de la calle Almirante Oquendo, 23. De allí son estas dos fotos.



Sigo disfrutando con ellos como el primer día, aunque reconozco que también lo paso genial con el irreverente y durísimo humor del Dr. Tangalanga, posiblemente el mayor cabronazo de toda Argentina, a pesar de que en España no es muy conocido:



¿No es fortísimo? Os lo recomiendo a todos. Hay montones de vídeos suyos en youtube. Es el Dr. Tangalanga.