29 diciembre 2012

DE CABEZA HACIA UN ESTADO POLICIAL

En 2013 conoceremos la lista de grandes defraudadores y morosos. Es una magnífica noticia solo eclipsada por no ampliar la revelación con los nombres de los pederastas, los condenados por violencia de género y los portadores del VIH. ¿Cómo es posible que no nos demos cuenta de que además de vivir en una pseudo democracia tutelada nos estamos deslizando peligrosamente hacia un estado policial?

¿Recuerda alguien la polémica surgida entre PSOE y PP por el sistema de escuchas telefónicas SITEL durante la legislatura pasada? Ahora que el PP gobierna, ya no hay quejas sobre las garantías que ofrece SITEL o si supone un abuso del Estado contra el Gobierno. Sumemos a eso la denuncia de Amnistía Internacional España por el uso desproporcionado de la fuerza por parte de los Cuerpos de Seguridad en manifestaciones y concentraciones de protesta ocurridas en los últimos meses. ¿No es todo muy preocupante?

Pero lo más brutal es la filtración de “borradores policiales” a los medios de comunicación para, a través de la presión de la opinión pública, obligar a las autoridades judiciales a que investiguen a alguien, incluso a un partido político, sin que nadie se responsabilice de las acusaciones. La legalización de las denuncias anónimas. Pura GESTAPO. A partir de ahora, cuando un policía quiera causarle problemas a alguien no tiene más que escribir en un oficio una serie de acusaciones de cualquier delito, darle el nombre de “borrador de informe” al documento elaborado y enviárselo al periódico correspondiente (hay muchos y de variadas líneas políticas, con lo que solo hay que encontrar el que comulgue con las tesis de uno), aunque por el camino se cometan un montón de delitos. No es necesario que el “informe” esté registrado, ni que lleve la firma de ningún funcionario. El periódico en cuestión lo publicará sin mayor comprobación y se remitirá en todo momento a fuentes policiales anónimas, aunque se puede ahorrar el trámite anterior si lo hace el periódico directamente. Es lo que tienen los borradores de informe policial, que siempre los puede hacer cualquiera. Total, nadie se responsabilizará de lo que pone allí...

Para defender el buen hacer y la profesionalidad de los funcionarios policías, siempre habrá un sindicato policial (hay tantos como periódicos) que defenderá la legitimidad de cualquier policía para investigar lo que les plazca. Y oportunamente se acusará a quien critique este comportamiento estalinista de connivencia con el delincuente. Si alguien alegase que no hay ninguna prueba, el coro replicará rápidamente que es porque no se ha querido investigar. Y así acabamos de convertir España en un estado policial puro y duro. Donde los delitos, si no se han probado es porque no se han investigado. En tal de acabar con el proceso soberanista de Catalunya, lo que haga falta. Aunque sea convertirnos en un estado policial o directamente en una dictadura militar como propone la incalificable Asociación de Militares Españoles que defiende la intervención de las Fuerzas Armadas en Catalunya. ¿Se puede  ser más tarugo?

 

16 diciembre 2012

¿QUÉ SABE BENEDICTO XVI SOBRE LA PAZ?

Echemos un vistazo a algunos de los principales conflictos bélicos que hay ahora mismo en el mundo, muchos de los cuales jamás hemos oído en boca del Papa Benedicto siglo XVI –como acertadamente le denomina Matías Vallés–, más preocupado últimamente por cosas más mundanas, como su perfil de twitter o proclamar santos a otra hornada de religiosos y religiosas, siempre más de lo primero que de lo segundo, por supuesto.

Afganistán, Chad, Sudán, Colombia, Etiopía, Irak, Israel-Palestina, Nigeria, Pakistán, República Democrática del Congo, Somalia, Uganda, Yemen, etc. Desafortunadamente, la lista es bastante más larga, pero cito los que más vidas humanas se han cobrado según diferentes organismos internacionales.


A poco que analicemos, comprobaremos que ni en uno solo de los casos citados las partes enfrentadas han expresado jamás que la eutanasia sea uno de los motivos, siquiera colateral, que les ha empujado a empuñar las armas. Es más, no consta que en ninguno de esos países haya legislación al respecto o que la eutanasia se aplique de forma habitual y regular.

El aborto tampoco aparece como motivo de confrontación en estos países. Y el matrimonio homosexual está penado, incluso con la muerte, en la inmensa mayoría de ellos. Sin embargo, los bandos en conflicto no han expresado jamás preocupación por estos asuntos. Nunca han manifestado la más mínima intranquilidad por ellos, como no sea imponer la visión religiosa y teocrática de la vida y la política de un grupo, por encima del resto. ¿Les suena?

Si hiciéramos un ejercicio de cinismo de igual intensidad pero sentido contrario al que hace el Papa, podríamos afirmar que los países que reconocen el matrimonio homosexual son países donde se garantiza la paz y la democracia, lo que supone que este asunto no solo no es una amenaza para la paz sino una garantía de paz.

Sin embargo, el Papa de Roma, en su infinita sabiduría y santidad, ha alertado públicamente que la eutanasia, el aborto y el matrimonio gay son graves amenazas para la paz mundial. Parece que el santo padre ha aprovechado para arrimar el ascua a su sardina… Desde luego, ni una palabra sobre la mortalidad infantil provocada por la desnutrición, la pobreza, las enfermedades que no se combaten por falta de recursos sanitarios, la inestabilidad política motivada por el fanatismo religioso y la intolerancia. Tampoco una llamada de alerta sobre las desigualdades entre hombres y mujeres, o los abusos que en casi todos los países que he citado sufren las mujeres por el hecho de serlo, condenadas a ser seres humanos inferiores que por naturaleza y por decisión de Dios, según algunos, no pueden llevar a cabo tareas que la divinidad encargó al hombre en exclusiva. ¿Les suena?

Es cierto que en su discurso, el Papa denuncia la creciente desigualdad entre ricos y pobres y también el capitalismo financiero no regulado, así como el terrorismo, la delincuencia internacional y los “fundamentalismos y fanatismos que distorsionan la verdadera naturaleza de la religión”, de la cual él se autoexcluye hábilmente, sin ningún razonamiento posterior.

Cuando el máximo representante de la Iglesia católica, líder espiritual de millones de hombres y mujeres en la Tierra, se pronuncia con esta ligereza sobre las amenazas a la paz, demuestra nítidamente que su visión de lo que es o no la paz está alejadísima de la realidad. Sus obsesiones le pueden y le impiden discernir el verdadero origen de los problemas que hoy sacuden a la humanidad.

Somos ya miles de personas los que creemos que la verdadera amenaza para la paz son el fanatismo, la intransigencia, la discriminación entre hombres y mujeres, las desigualdades y la negación de los derechos de los demás. Solo hay que observar qué sucede en los países que están en guerra. Y en todo esto, la Iglesia católica que dirige Benedicto XVI es una gran maestra.

12 diciembre 2012

LA POCA FE DE ROTGER

Empatizo con alguien que llora porque es algo que yo hago a menudo, lo de llorar digo. No puedo evitarlo. Es ver llorar a alguien e inmediatamente me pongo en su lugar. No importa si quien llora es alguien a quien no conozco de nada o si es alguien próximo a mí. Pero hay profesionales a los que no he visto llorar nunca, ni en las peores condiciones posibles, y otros que sí he visto sollozar a menudo y por ello empatizo aún más: los políticos.
 
Ayer vimos las lágrimas de Pere Rotger, obligado a dimitir de su cargo de presidente del Parlament por el juez Castro, el mismo que desimputó a velocidad de la luz a Rafael Torres. El mismo que ni tan siquiera ha llamado a declarar a la infanta Cristina, aunque ha interrogado a todos los empleados y proveedores del Instituto Nóos que era de su propiedad junto a su marido Iñaki Urdangarín. El mismo que ahora afirma que “no es función de este juzgado causar dimisiones”, pero las causa a discreción, según le interese y convenga.

Recuerdo también haber visto las lágrimas de Esperanza Aguirre cuando presentó su dimisión en septiembre de este año. Y las de su eterno rival aunque compañero de partido, Alberto Ruiz Gallardón, cuando dimitió en diciembre del año pasado para acabar de destrozar la Administración de Justicia después de haber arruinado Madrid. Un poco más atrás en el tiempo, recuerdo las lágrimas de Miquel Nadal cuando el 3 de diciembre, también por estas fechas pero en 2009, presentó su dimisión como conseller de Turismo del gobierno de Francesc Antich. También recuerdo la cara de Esperanza Crespí llorando desconsolada, a lágrima viva, cual virgen Dolorosa, mientras comunicaba a los empleados del Imfof su despido. No sabría decir cual de todos los casos citados era más impostado, aunque posiblemente el último se lleve la palma por la hipocresía y la caradura exhibida. Al fin y al cabo, los demás tenían motivos para llorar pero la regidora de Comercio, Trabajo y Juventud en el fondo se estaba partiendo la caja mientras enviaba caprichosamente a decenas de trabajadores al paro. Más recientemente lloró desconsolado José María Rodríguez, aunque parezca increíble, cuando dimitió como delegado del Gobierno en Baleares. Y también Rafa Torres al conocer su milagrosa desimputación, aunque él fue el beneficiario del curso de oratoria impartido por Over Marketing cuyo sobrecoste presuntamente pagaron los ciudadanos de Inca y que con tanta diligencia investiga el juez Castro.

Casi todos ellos me producen un sentimiento de aflicción y pena. No me alegro de su sufrimiento. Pero debo reconocer que en el caso más reciente, el de ayer mismo, de Pere Rotger, no es justo que eche la culpa a Rafael Torres y afirme sentirse traicionado por su sucesor. Aquí lo que ha pasado es que alguien gritó “¡sálvese el que pueda!” tras ver cómo embestían Castro y Horrach. Y el primero en declarar fue el que se largó solo llevándose el único bote salvavidas, dejando a los demás tirados y con el barco yéndose a pique.

Y además, creo que la culpa no es de Torres, sino del propio Rotger. A Torres le salvó su fe, como al samaritano del Evangelio de San Lucas 17, 11-19. Torres hizo una promesa a la virgen de Lluc y fue salvado. Sin embargo, a buen seguro Rotger no tuvo tanta fe porque no cabe ninguna duda de que de habérselo pedido a la Virgen con fervor, como hizo Torres, Nuestra Señora de Lluc no hubiese obrado un milagro con uno sí y con el otro no.

Más le hubiera valido al ex presidente del Parlament peregrinar a pie de Inca a Lluc como hizo Torres. ¡Cuántas lágrimas se hubiese ahorrado!

07 diciembre 2012

EL ESCANDALOSO ABSENTISMO DE LOS FISCALES

A mediados de noviembre un ciclista de Sant Joan, Joan Roig, fue atropellado mortalmente en Artá por un conductor que a parte de ser un delincuente habitual, se dio a la fuga, ocultó el coche y trató de cambiar las placas de matrícula. Al menos había tres delitos de los que podía ser acusado: imprudencia con resultado de muerte (si no directamente un delito contra la seguridad del tráfico), omisión del deber de socorro y falsificación de placas de matrícula. Sin embargo, el fiscal de guardia en Manacor no estuvo presente cuando la Guardia Civil de Tráfico entregó al presunto autor del homicidio ante el juez de guardia, Ángel Mateo Goizueta. Por tal motivo, nadie ejerció la acusación y el magistrado tuvo que dejarle en libertad. A pesar de las protestas ciudadanas, nadie ha sido capaz de dar una explicación razonable por la cual el fiscal estaba ausente en una declaración donde hubiese sido absolutamente pertinente una petición de prisión preventiva. El fiscal no estaba en su lugar y aquí no ha pasado nada.

El miércoles pasado tuvimos noticia de un caso no tan grave, pero igual de escandaloso por lo indicativo del pelaje de la fiscalía anticorrupción. Dos ex altos cargos del IB-Salut durante el último Pacte de Progrés, Josep Pomar y Javier Clavero, acudieron a declarar ante el juzgado de instrucción nº 3 de Palma, para aclarar el pago de los pluses salariales de los médicos a pesar de que una sentencia había declarado nulos. ¿Por qué motivo ningún representante del ministerio público acudió a las declaraciones e intervino en ellas? El absentismo de los fiscales es escandaloso. No fueron porque no tienen el más mínimo interés en el caso: afecta a miembros del PSIB y cuando esto sucede, no hay nada más que investigar ni esclarecer. Si fuesen de UM o del PP otro gallo cantaría, y habría interrogatorio incisivo y filtración a la prensa de petición de medidas cautelares e informes policiales varios. He aquí la doble vara de medir que con acierto denuncia el portavoz del PP, Miquel Ramis.

El absentismo es una falta disciplinaria para todo funcionario público, excepto para los miembros de la fiscalía, quienes aunque su ausencia injustificada causa un grave perjuicio a la Administración de Justicia, nadie es expedientado ni se ofrece explicaciones a la opinión pública. Convendría que les coloquen un reloj para fichar la hora de entrada. Empieza a ser hora que alguien les diga a los miembros de la fiscalía cuales son sus obligaciones y que si las incumplen, como es público y notorio que algunos hacen a menudo, sean sancionados por ello. Ya está bien de funcionarios vagos y absentistas que no van a trabajar sin justificación pero a los que se les ingresa la nómina puntualmente.

http://www.ciutat.es/opinion/columnistas/item/4761-el-escandaloso-absentismo-de-los-fiscales

04 diciembre 2012

¿A CUÁNTOS CIUDADANOS ENGAÑÓ EL PP?

¿Cuántos miles de pensionistas votaron al PP porque se creyeron que les subiría las pensiones al mismo nivel que el IPC, que es lo que manda la Ley? ¿Cuántos miles de empresarios votaron al PP porque creyeron de buena fue que no subirían el IVA?
¿Cuántos miles de parados confiaron en que el PP lograría crear puestos de trabajo con una reforma laboral que no abarataría el despido sino que favorecería la contratación? ¿Cuántos miles de votantes afectados por las estafas bancarias (desde las participaciones preferentes hasta las acciones de la Bankia de Rodrigo Rato) se encomendaron a un gobierno del PP para recuperar sus inversiones y ahora se encuentran con que se les obliga a pleitear pero pagando unas tasas aberrantes que no pueden costear? ¿Cuántos miles de ciudadanos votaron al PP para evitar pagar más por sus medicamentos? ¿Cuántos miles de ciudadanos votaron al PP seguros de que con este partido en el gobierno, echarían a patadas de las instituciones a los de la rama política de ETA que continúan sin arrepentirse de nada y homenajeando a los terroristas? ¿Cuántos miles de ciudadanos votaron al PP confiando en que no se sentarían a negociar con terroristas, hasta que los terroristas se pusieron en huelga de hambre y soltaron al primero, nada más y nada menos que el secuestrador y torturador de Ortega Lara? ¿Cuántos miles de honrados ciudadanos votaron al PP creyendo que embridaría el descontrolado gasto público reestructurando la Administración (Senado, Diputaciones, Ayuntamientos…) y no cercenando servicios en la Sanidad y en la Educación?

Pues a pesar de todo lo dicho, no fueron tantos miles sino más bien unos pocos miles. El PP solo consiguió en las últimas elecciones generales unos 552.000 votos más que en 2008. Frente a un candidato como Pérez Rubalcaba y una gestión como la protagonizada por Rodríguez Zapatero, Mariano Rajoy no consiguió más que un puñado de votos más que tres años antes. Los ciudadanos no confiaron masivamente en el PP, contrariamente a lo que se nos vendió. Desconfiaron del PSOE de Rubalcaba, un candidato nefasto incapaz de desvincularse de Zapatero porque fue cómplice de su suicida política económica desde que apareció la crisis. Fueron 4.315.000 votantes menos los que hicieron perder al PSOE 59 diputados y que el PP ganara 32.
El PP no engañó a casi nadie no porque no lo intentara (con la poca convicción que Rajoy demuestra en todo, hasta en la mentira) sino porque muy pocos le creyeron. Todo lo que Rubalcaba pronosticó que Rajoy haría al llegar al poder se ha cumplido milimétricamente cuando se acaba de celebrar el primer aniversario de la victoria electoral: abaratar el despido, copago farmacéutico, subida del IVA, no actualización de las pensiones con el IPC, reducir el subsidio por desempleo, recortar salario a los empleados públicos, subir los impuestos en general y recortar en las “líneas rojas” que él mismo había establecido en Sanidad, Educación y Servicios Sociales.

Y lo peor es que en este país nuestro en abierta recesión económica, con la banca rescatada por la Unión Europea, con el paro desbocado y rozando los cinco millones de desempleados (128.000 más que en octubre), el crédito desaparecido, la presión fiscal insoportable y el consumo desplomado, los ciudadanos están siendo empujados por sus gobernantes al camino de Grecia: la miseria, la exclusión social y el hambre.

02 diciembre 2012

UN PAÍS ASÍ NO PUEDE IR BIEN NUNCA

El periódico ABC de hoy domingo abre su portada con la foto del general Jaime Domínguez Buj, jefe del Estado Mayor del Ejército. En su interior hay una interesante entrevista, aunque tengo mis dudas sobre si el asunto merece la portada del rotativo con una fotografía a toda página. No veo yo a los lectores del ABC perdiendo el sueño por conocer la opinión del general sobre los recortes, la verdad. Pero esto me recuerda que hace dos domingos el mismo ABC publicaba similar fotografía y otra entrevista en profundidad a la duquesa de Alba, de la que no se conoce ningún otro mérito en su vida que no sea haber nacido en una cuna aristocrática e inmensamente rica.
 
Hay periódicos empeñados en recordarnos que España, a parte de un país arruinado y un Estado fallido, es una nación anclada en el antiguo régimen, que vive de la guerra contra el francés y del hundimiento del acorazado Maine. El domingo próximo me espero una entrevista al cardenal Rouco Varela o a monseñor Cañizares. Prefería las portadas de Rafa Nadal o Fernando Alonso. Ahora como no pueden abrir los domingos con el Real Madrid, que anda 11 puntos por detrás del Barça, pues nada mejor que tirar de Ejército, nobleza y clero, las tres clases propias de una sociedad estamental. Hay cosas que nunca cambian en España.

Un país donde el presidente del Gobierno reunido informalmente con el primer ministro británico y el presidente francés y les suelta literalmente: “It’s very difficult todo esto”…
Un país donde se pretende que un anónimo o un borrador de informe policial sin firma y sin autor sirva para iniciar una investigación judicial…
Un país donde el ministro de Hacienda y la vicepresidenta pueden acusar sin prueba alguna a un rival político de tener cuentas con dinero en el extranjero…
Un país donde el ministro del Interior declara abiertamente que por razón de sus creencias religiosas no puede aceptar la definición de matrimonio que hace la Ley…
Un país donde se indulta por dos ocasiones a cuatro policías condenados por torturas para que no vayan a la cárcel… y al gobierno solo se le ocurre decir que esa es su competencia…
Un país donde jueces, fiscales, abogados y procuradores se oponen a la Ley de Tasas Judiciales que el Gobierno del PP ha aprobado para reducir la litigiosidad sin proporcionar más medios a la Justicia…
Un país donde once miembros de una trama de blanqueo de dinero a la que se incautan millones de euros en efectivo es puesto en libertad porque se sobrepasó el plazo máximo de detención de 72 horas…

Este es un país sin futuro. Un país avergonzado de sí mismo que necesita tirar de victorias del S. XVIII para tener algo de lo que enorgullecerse. No me extraña que cada día haya más gente emigrando.

http://www.ciutat.es/opinion/columnistas/item/4658-un-país-así-no-puede-ir-bien-nunca