30 abril 2013

SOBRECOGE TANTA CARADURA



El Govern de les Illes Balears que preside José Ramón Bauza, en su lucha por meter en vereda a las empresas públicas que proliferaron en tiempos del último presidente del PP que le precedió en el Consolat de Mar, Jaume Matas, ha ido despidiendo a trabajadores con un desprecio absoluto hacia la legislación laboral. Las cosas en este ámbito no se pueden hacer peor porque se ha pretendido despedir sin indemnización. Y así el despido de siete trabajadores del Institut d’Innovació Empresarial de Balears (IDI), empresa pública que Bauzá heredó de Antich, pero que Antich heredó de Matas (podríamos discutir inútilmente quién recibió peor herencia), ha sido declarado nulo por la Justicia. Fueron despedidos sin indemnización y esto no es legal. La empresa se benefició de su trabajo y aunque gracias a la reforma laboral del PP podían ser despedidos con una indemnización de 20 días por año, no se les pagó nada. Ahora deben ser readmitidos, abonados sus salarios pendientes y vueltos a despedir con la citada indemnización.
 
Es obsceno que el diputado del PP Fernando Rubio acuse, siguiendo el guión correspondiente, al Govern del Pacte por haber dejado unas plantillas sobredimensionadas, hipotecando y atando de pies y manos al Govern actual. ¿Cómo cabe calificar entonces lo que hizo Matas al crear todo este universo de empresas públicas? No recuerdo haber oído entonces a Fernando Rubio quejarse y eso que él era conseller insular. Tampoco se lamenta ahora por aquel dislate que es la génesis del problema. Y tampoco le he oído nunca quejarse por el elevado número de asesores existente en la Conselleria de Turismo, donde actualmente anida su propia esposa Cristina Puig, aunque debe ser por sus propios méritos porque ya estuvo en el Ajuntament de Marratxí bajo el manto protector del entonces alcalde del municipio y actual president del Govern, José Ramón Bauzá.

Es casualidad que acabamos de conocer que el presidente de Emaya y regidor de Medi Ambient, Andreu Garau, ha enchufado en esta empresa pública como cargo de libre designación al presidente del distrito del PP de calle Aragón, un tal David Suñer. Y que en junio del año pasado ya contrataron de igual modo a Francisco Rodríguez, también militante del PP del mismo distrito. Igual que hicieron con Pedro Campaner, otro militante del PP digitado en Emaya, al que hicieron jefe de un departamento de nueva creación. ¿Con qué caradura nos habla Fernando Rubio de plantillas sobredimensionadas? ¿Con qué desvergüenza se atreve a darnos la tabarra sobre la herencia recibida alguien que ha hecho de su vida y la de sus parientes más cercanos un continuo ejemplo de nepotismo y enchufismo más descarado? Hace falta sentir desprecio por los ciudadanos y por sus impuestos para manifestarse con esta ligereza. O ser un parásito político criado en el vivero de los de su especie, las Nuevas Generaciones del PP.

Poco importa lo que hiciera el Pacte de Progrés porque la sentencia de los ciudadanos de Balears fue emitida el 22 de mayo de 2011 y los enviaron a la oposición. Pero es descorazonador que a cada decisión errónea que ahora protagoniza el PP, como despedir a trabajadores sin indemnización, haya que escuchar la oportuna justificación en que la izquierda la hizo peor. Es insufrible comprobar que nada ha cambiado y que las políticas arrogantes y de menosprecio a la ciudadanía son continuadamente repetidas tanto por PSOE como por PP. También UM enchufaba a sus adictos en Emaya y miren cómo terminó. No veo dónde está la diferencia entre lo que denuncia el PP y lo que ellos mismos hacen.

(Publicado en www.ciutat.es: http://www.ciutat.es/opinion/columnistas/item/7145-sobrecoge-tanta-caradura) 

 

No hay comentarios: