27 mayo 2017

LAMENTABLE

Las escenas vividas en el Aeropuerto de Son Sant Joan el pasado jueves son deplorables. Como salvajes que no conocieran más Ley que la suya propia, que normalmente suele ser a base de golpes y gritos, el gremio de taxistas hace de su capa, un sayo. Su respuesta a la presencia de taxis piratas, es fastidiar indiscriminadamente a todas aquellas personas que no contratan a los taxis pirata y en cambio, hacen cola para subirse a un taxi legal. Así es como ellos agradecen a los clientes su fidelidad. Dado que se trata de un colectivo que rebosa testosterona y por tanto, habitualmente carbura poco lo que hace y lo que dice, sus movilizaciones suelen consistir en perjudicar al prójimo con todas sus fuerzas. Ni preavisos de huelga ni servicios mínimos. Así las cosas, ya que su política gremial es causar al conjunto de ciudadanos el máximo perjuicio, como cuando protestan circulando en caravana para colapsar las calles, que ellos consideran suyas, es legítimo que estos se defiendan apoyando a las plataformas como Uber o cualquier otro servicio de transporte que, aunque ellos lo denominen pirata, están lejos de ser la mitad de piratas que ellos.

Es muy legítimo que pidan más inspección y control, pero lo que no pueden hacer es comportarse como gorilas, emprenderla a golpes, agredir a personas y sobre todo, dejar de prestar el servicio que les es propio, sin aviso previo ni establecer servicios mínimos, como debe hacer todo el mundo. Desde luego, en cualquier país normal tales comportamientos serían castigados y a los taxistas que hemos podido ver en televisión actuar de matones, les volaría la licencia. No será el caso y el Govern se apresta a satisfacerles en todo, que nunca será bastante. Recuerden que solo hace unas semanas protestaban contra la puesta en marcha de líneas regulares de transporte interurbano desde Son Sant Joan hasta los principales núcleos turísticos de la isla. Si por ellos fuera, prohibirían todo transporte que no sea el suyo.


Yo no me monto en un taxi si puedo evitarlo y como es evidente, no empatizo con energúmenos que toman rehenes. Dado que ellos han optado por jorobar a todo el mundo por sistema, como en su día hicieron los controladores aéreos hasta que los metieron en vereda, animo a todo el mundo a buscar alternativas al taxi. Así, cuando decidan volver a secuestrar a sus propios clientes y dejarles tirados, ya no molestarán a nadie.

(Publicado en Última Hora)

No hay comentarios: