10 mayo 2016

¿ME LO PUEDE REPETIR?

Me río yo de las encuestas del CIS y de cualquier otro organismo, empresa o entidad de las muchas y muy buenas que se dedican a la demoscopia. Lo digo con todos los respetos hacia los profesionales, no se me malinterprete. Pero si siempre se nos dice que la clave del resultado electoral está en el número de indecisos y en los abstencionistas, difícil será que las encuestas acierten porque en estas próximas generales hay demasiados factores que distorsionan cualquier pronóstico. Indecisos igual no habrá muchos, ni votantes que vayan a cambiar el sentido de su voto, pero gente que se abstendrá habrá más de lo que es habitual, que siempre suele ser mucha.
Dado que tras las elecciones del 20-D los líderes de los cuatro partidos más votados (PP, PSOE, Podemos y Ciudadanos) se mostraron pletóricos y satisfechos, y todos coincidieron en señalar que si no se lograba formar un gobierno sería un fracaso colectivo, a ellos hay que responsabilizar de la situación en que nos hallamos. Y dado que ellos y solo ellos (unos en mayor medida que otros) son los culpables y sin embargo todos ellos vuelven a presentarse a las elecciones con idénticos programas, la ciudadanía les castigará pasando de ellos y yendo a la playa como corresponde a un domingo de finales de junio.
Rajoy, Sánchez, Iglesias y Rivera han sido incapaces de interpretar el mensaje de la ciudadanía y piden que se les repita el mensaje. Como aquel que mantiene una conversación telefónica y oye algo que no se espera, o que no quiere oír, y le pide al interlocutor: “¿me lo puede repetir?”. Solo que esta repetición del mensaje nos costará varios millones de euros que usualmente se embolsan empresas del entorno de cada partido. Nadie es tan estúpido de encargar sus actos electorales, mítines, fotografías y carteles de campaña a empresarios que simpatizan con otra formación o que son desconocidos para los equipos que organizan todo el tinglado, por sencillo y austero que se anuncie.
Pero déjenme decirles una cosa: si alguien esperaba que el colectivo peor valorado por la ciudadanía y al que esta señala como uno de los principales problemas del país, los políticos, solucionara la papeleta, ya se ve cuán equivocado estaba. Y también sería bueno que nos explicaran la razón por la que el mallorquín Ramón Socías no debe repetir como candidato nº 1 al Congreso de los Diputados por Baleares y, en cambio, resulta “lógico” que Pedro Sánchez sea el candidato a presidente del Gobierno del PSOE.
El panorama político es tan aburrido, tan tedioso y tan mediocre que no cabe esperar que los ciudadanos solucionen el embrollo en el que estamos metidos. ¡Que lo arreglen ellos!

(Publicado en mallorcadiario.com e ibizadiario.info)

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