12 septiembre 2015

POLICÍAS DEL LADO OSCURO

El homicida que acabó con la vida de Karina Rosales en mayo de 2012 está libre. Si como determina el veredicto del jurado popular tras el correspondiente juicio en la Audiencia Provincial de Palma, no está probado de forma inequívoca que el acusado Francesc R.R. fuese  el autor del homicidio, hay que concluir que el tipo que la degolló anda suelto. No siempre es fácil echar el lazo a un criminal y los investigadores a menudo hacen lo que pueden. Lo que no puede admitirse es que el acusado, ahora absuelto, afirme que el capitán Bartolomé del Amor (a la sazón jefe de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil) “es el más incompetente que ha pisado Baleares y lo puedo demostrar”. Puedo asegurar a ciencia cierta que no es así, porque el nivel de incompetencia de otros muchos oficiales de la Guardia Civil es infinitamente superior y sé de lo que hablo. Me pregunto cómo pensaba demostrar que alguien es “el más incompetente”. ¿No pretendería hacer desfilar por la Audiencia a todos los capitanes de la Guardia Civil que han pisado Balears? En todo caso hay que reconocer que los miembros del jurado no acabaron convencidos de que él fuese el autor y sin embargo sí hacen un reproche a los investigadores cuando afirman que “no se han seguido todas las vías de investigación posibles”. El hombre juzgado fue policía local de Sant Josep y a decir del fiscal del caso, “es policía, no es tonto y sabe cómo funciona esto”. A falta de pruebas concluyente, pues nunca apareció el arma del crimen, absuelto. 

Otro expolicía nacional es considerado el supuesto cerebro del atraco a punta de pistola ocurrido en La Porciúncula y también fue detenido otro agente en activo del Cuerpo Nacional de Policía. Y es que en todo colectivo pueden surgir manzanas podridas, algo por otra parte inevitable. El botín fue de 297.000 euros y solo se han recuperado 18.000. De cualquier forma las víctimas del robo hubiesen hecho bien encargando el transporte de semejante cantidad de dinero a una empresa de seguridad, que para algo están los furgones blindados. Pareciera que en Balears algunos hoteleros se creen que nadie mejor que ellos mismos para transportar y custodiar su dinero. Recuerden lo que le sucedió a Empresas Matutes en octubre de 2013 en Ibiza, cuando fue víctima de un misterioso robo de 2,7 millones perpetrado presuntamente por otro expolicía que se pasó al lado oscuro de la fuerza.

(Publicado en Última Hora)

 

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