22 octubre 2008

Estos maricones depravados fornicando en las casas cuartel de la Guardia Civil...

Repasando algunos papeles que tengo amontonados en mi despacho, he encontrado un artículo de un escrito y periodista grancanario, Miguel Jiménez Marrero (1913), conocido falangista que ocupó el cargo de presidente de la Asociación de la Prensa de Las Palmas de Gran Canaria, y por tanto, facha recalcitrante de lo peores, que ya es decir. Lo publicaba un panfleto llamado "Casa Cuartel" y tituado "En torno a la Guardia Civil, ¿qué está pasando aquí?", dice así:


"El espectáculo que se ha montado en torno al glorioso y tradicional Cuerpo de la Guardia Civil, con el deliberado propósito de desacreditarla es de Juzgado de guardia. Ante la noticia -lamentable noticia- de que uno de sus números -entre miles- no sólo se ha declarado maricón sino que pretende que su "amante" comparta cama con él en la Casa Cuartel de a Benemérita Institución, toda la jauría antimilitarista y de enemigos de la tan prestigiosa Guardia Civil, ante el asombro de la inmensa mayoría de los españoles que no han perdido la vergüenza, se han lanzado a tumba abierta, a compartir la actitud del citado maricón. Especialmente repugnante ha sido la actitud de la mayoría de los medios de comunicación, que han proclamado "urbi et orbe" el "gran acontecimiento", con amplísimos espacios en la prensa, en ciertas emisoras de radio y, lo más lamentable, en televisión.


Quienes tuvieron la desgracia de contemplar el asqueroso programa -como todos los suyos- de ese sujeto que dirige el espacio llamado "Crónicas marcianas" o algo así, un tal Sardá, ofrecido a raiz de la declaración "oficial" de maricón del citado Guardia Civil, se preguntan, teniendo en cuenta además otros programas basura de otras cadenas, incluída la oficial, si no está en vigor una ley que condena el llamado "escándalo público" y qué es lo que hace el gobierno ante tanta porquería, ante tanto lavado de cerebro, sobre todo entre la juventud, que están llevando adelante muchos de estos medios informativos, poniéndose siempre ¡siempre!, de parte del degenerado y nunca el ciudadano que defiende la decencia. Un ejemplo de esta actitud, la observamos también no solamente en algunos programas y en las llamadas "revistas del corazón", sino incluso en algunos populares programas de radio, como es el titulado "Protagonistas" que dirige Luis del Olmo, en el que cada vez más corto espacio dedicado a la intervención de los radioyentes que llaman por línea telefónica, uno de estos -por cierto continuamente interrumpido por los tertulianos de turno -entre ellos una ex ministra socialista- cuando mostraba su opinió claramente contraria a que se permitiera que la Casa Cuartel se convirtiera en un burdel, donde los pequeños hijos del resto de los Guardias, contemplaran como un compañero de sus padres se acostaba con otro hombre para hacer lo que ya sabemos que hacen los maricones y que tan gráficamente definió el Premio Nobel Camilo José Cela, cuando era materialmente asediado por un grupo de periodistas para que se definiera a favoro en contra de los que, usando el eufemismo llaman homosexuales, o se agarran al inglés "Gay" para no tener que pronunciar la españolísima palabra de "maricones". Cela fue tajante en la contestación: "lo que yo no quiero es que me den por el culo". Así textualmente, se propagó por la radio, por televisión y en la prensa.


Capítulo aparte merece la postura del partido socialista y de los grupúsculos comunistas, sus más destacados dirigentes se declaran partidarios del mariconeo y asisten en lugar destacado a las manifestaciones organizadas por asociaciones de maricones y lesbianas.


En el espacio de "Protagonistas" al que hemos hecho mención, un energúmeno que actuaba como tertuliano, interrumpió bruscamente al radioyente que se mostraba contrario a que el ya mencionado Guardia Civil, llevara a su amante a la Casa Cuartel. El tal tertuliano llamó "fascista" al citado radioyente, cuando lo que tenía que llamarle era "comunista", pues éstos, en la Unión Soviética, hacían "desaparecer" a los maricones, o los mandaban de por vida a Siberia.


Aquí, lo único cierto, es que desde que la Guardia Civil dejó de ser mandada por un Jefe Militar, los sucesivos Directores Generales civiles sólo han conseguido implicar en situaciones lamentables y hasta absurdas a un Cuerpo que merece los mayores respetos del pueblo, que ve en él su seguridad personal y la de sus pertenencias. Los socialistas son los autores, los culpables de este desaguisado, pues fueron los primeros en cargarse el mando militar en la Guardia Civil, con aquel funesto Roldán, que no sólo robó a la propia institución que dirigía, sino que causó un gravísmo daño moral a un Cuerpo que no se merecía tal castigo. Luego le han sucedido otros Directores Generales que han constituido un rotundo fracaso y el actual, hasta se definió, en un discurso, (creo que fué en Valladolid) como partidario de esta convivencia antinatura en los Cuarteles de la Guardia Civil. La pregunta final, ¿qué hace el Gobierno ante esta campaña difamatoria contra la Guardia Civil? ¿Por qué no reintegra a la Dirección General del Cuerpo a un Jefe militar, pues militar es la Guardia Civil?"



Esta publicación, editada por una empresa denominada "Actualidad Militar S.L.", hasta no hace mucho era de distribución gratuita en cuarteles de las Fuerzas Armadas y de la Guardia Civil, mientras las publicaciones de las asociaciones de guardias civiles eran totalmente proscritas.

Todos los que hemos luchado por cambiar las cosas de una forma u otra, hemos pagado un precio (yo de los más altos...) y aquellos que no lo han pagado aún, o es que no han hecho nada y han pasado desapercibidos, o lo pagarán, porque la Guardia Civil es así. Son 160 años de historia inamovible y quien trata de modernizar algo, por pequeño que sea, sufre en sus propias carnes el ostracismo y el desprecio de sus jefes, cuando no un brutal acoso como del que yo soy víctima ahora mismo.

De todos modos, agradezco las muestras de solidaridad y apoyo de que he sido objeto, en especial a Jose Julio, Jesús, Suso, María del Mar, Tebar y Castelo, además de los compañeros de la Delegación de Baleares, Alicante y al Secretario General del SUP, José Manuel Sánchez Fornet. ¡Gracias a todos!

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Saludos:

Al señor Miguel Jiménez Marrero le diría que, a todos los efectos, puede sumar un maricón mas a su lista de excepciones a la "normalidad". Yo, en este caso, como maricón convencido y Guardia Civil disfruto de la belleza de esta profesión que se traduce en el servicio a los demás, incluido el Sr. Jiménez Marrero, porque para nada me implica su condición política, de pensamiento, raza u opción sexual, solo su condición humana.

El Sr. Jiménez se pierde todo esto. Él solo podrá acudir a la Fiesta del Pilar, por cierto, fiesta de todos los guardias civil, maricones o no.

Salud y suerte para ti Joan. Mi apoyo en estos momentos.

José Rodríguez
Las Palmas de Gran Canaria.

J.C.Córdoba dijo...

Hola Joan MIquel, soy cordobita, ya sabes, ese capullo de Madrid que fue una vez delegado, y tan solo queria dejar constancia aqui, por si alguien lo leyera, de mi agradecimiento y mi apoyo ante las putadas que estas sufriendo por haber defendido mis derechos y los de todos los pikoletos (incluso de los de aquellos que ahora te dan la espalda y los homofobos machotes con tricornio).
Animo, te dejo el enlace de mi blog por si te vale para echarte unas risas en un momento dado.
Nos vemos.
http://juanalbertoelias.blogspot.com/

Joan Miquel Perpinyà dijo...

Muchas gracias José y Juan Carlos. No sabéis lo que me molan vuestros mensajes. Cordobita, le he pedido tu móvil a Luis para llamarte, que me apetece charlar contigo. Te llamo un día de estos. Me alegro mucho de que lo de tu libro haya salido tan bien. Hacía falta algo así y sólo tu podías hacerlo. Un abrazo fuerte, amigo.

Anónimo dijo...

Nada perpi, ni puto caso a esta pandilla de borregos como el del artículo.
ya sabes que si me necesitas aqui estoy.
un abrazo,

COTO

Anónimo dijo...

Buenas tardes,

Pues to también soy Guardia Civil y, aunque no comparto para nada los insultos vertidos en dicho artículo, sí comparto su fondo. Me explico, no me parece mal que hayan gays, los ha habido y los habrá siempre, independientemente que lo consideremos contranatura o no, ese es otro debate, pero sí me parece contrario a nuestro Cuerpo que se haga esa apología de la homosexualidad tan a los cuatro vientos, como vanagloriándose de una condición, yo no voy por las calles gritando que soy hetero, lo soy y punto. Puede gustaros o no, pero este Cuerpo es especial, ya lo sabíais al entrar y si no lo sabíais aún estáis a tiempo, pero, como digo, este Cuerpo tiene su idosincracia, y una de ellas es velar por su dignidad ante la sociedad y eso no se consigue gritando que uno es gay y quiere que le den un pabellón por ello, lo que hay que hacer es trabajar por el ciudadano calladamente, luchando por nuestros derechos claro, pero no usando la discriminación positiva para conseguir prebendas. Lo dicho, que com yo también soy libre (y hetero por suerte) digo que me parece fatal este tipo de propaganda del Cuerpo, más trabajar y menos darse de baja para cobrar el dinero fácil.