30 agosto 2014

CON LA MIERDA AL CUELLO

Hospital Son Espases.
Algunos se lamentan del nivel de corrupción que aquí se ha llegado a alcanzar. Se deduce del alto número de procedimientos judiciales, las condenas en los tribunales, los presos ingresados en la cárcel y las cantidades recuperadas para la hacienda pública. ¿Qué sucedería si no hubiese Fiscalía Anticorrupción en Baleares? No crean que la hay en todos lados. El fiscal superior del País Vasco, Juan Ramón Calparsoro, reclama la creación de una en su territorio porque en Euskadi carecen de ella. Solo se puede luchar contra la corrupción allí donde hay medios humanos y materiales adecuados y voluntad de hacerlo. A la vista está que no sucede en todas partes y por eso aquí batimos récords. Hay Anticorrupción donde interesa que se actúe y no la hay donde no conviene.

Ahora está siendo investigada por la Fiscalía en unas diligencias preliminares la adquisición de los terrenos del hospital Son Espases y la adjudicación de su construcción, explotación y mantenimiento por 635 millones. Incluso en agosto se ha trabajado para aclarar uno de los asuntos más escabrosos que afecta a la obra pública más cara hecha en Baleares. Pese a que el asunto aún no ha sido judicializado, ya conocemos profusamente los detalles del caso y de las confesiones de los “arrepentidos” –principalmente la ex consellera de Sanidad Aina Castillo, quien ha revelado que Jaume Matas le ordenó paralizar la adjudicación a OHL y Javier Rodrigo de Santos, quien dice que el president le ordenó comprar la finca Son Espases Vell–. Todo apunta a una gran operación de saqueo diseñada en Madrid y por lógica los constructores beneficiados deberán ser llamados a declarar. La imputación de la infanta Cristina de Borbón se antoja una minucia frente a la más que previsible citación de Florentino Pérez (Dragados-ACS) y Juan Miguel Villar Mir (OHL).
 
PP y PSIB se acusan mutualmente. El concurso que convocó el Govern de Matas pudo estar amañado y el proyecto de ampliación del PSIB aparece plagado de irregularidades que encarecieron la obra 280 millones. Será difícil para ambos desligarse de un caso que da aire a otras formaciones que aglutinan el descontento social y que se frotan las manos viendo a PP y PSIB con la mierda de la corrupción al cuello. Al final resultará que UM no era el partido más corrupto, como se nos había dicho. De confirmarse las sospechas, no fue ni de lejos el que más dinero público pudo malversar.
 
(Publicado en Última Hora)

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