08 octubre 2011

SOBRECOSTES EN BALEARES


En agosto de 2009 la Fiscalía Anticorrupción detuvo en la Operación Espada a ex altos cargos del PP en Baleares, un publicista, un arquitecto y un jefe de obra por su supuesta implicación en una trama de corrupción en el seno del Consorcio del velódromo Palma Arena. El sobre coste de la obra fue de 52 millones de euros, porque estaba presupuestado en 48 y costó casi 100 millones.

El martes en el Parlament la consellera de Salut Carmen Castro afirmó que el sobre coste del Hospital de Son Espases supera los 280 millones de euros. La inversión más cara de la historia de Baleares ha acabado costando 46.588 millones de pesetas más de lo proyectado.

Espero que nadie nos acuse de demagogia si pedimos que tal sobre coste sea investigado con el mismo rigor y con idéntico celo que el del famosísimo velódromo. Porque si en 2009 se calificaba el Palma Arena de pozo sin fondo, ¿cómo hay que calificar una desviación de 280 millones por encima del proyecto inicial? Un auténtico agujero negro estelar que habremos de pagar hasta el 2039. Cuando nuestros nietos nazcan allí, aún estaremos costeando el hospital.

Del mismo modo que se investigó por parte de la Fiscalía el desfase presupuestario del velódromo, ahora ha de investigarse con mucha más razón la relación de empresas que han llevado a cabo el proyecto, los trabajos encargados, cada una de las facturas (por si pudieran estar hinchadas, no lo descartemos), etc. Son ya demasiadas las irregularidades desveladas por la prensa que acaban en la papelera y no despiertan el celo de la Fiscalía Anticorrupción. Ya se sabe que si hay que investigar al PSOE, no existe el mismo interés. Pero este pufo es muy gordo para no mirar con lupa. Y llueve sobre mojado, porque sólo han sido objeto de investigación el PP y UM. Los demás no incumben a los fiscales, según parece.

1 comentario:

Albert dijo...

Matas dejó un sobrecoste de 52 millones, pero también esa deuda aumenta a raíz de los parones que ha sufrido Son Espases en los primeros años de Govern del Pacte, y qué decir de las modificaciones que se hicieron con las obras iniciadas. Ni el PP de Matas fue un santo, y ni el PSOE debe irse de rositas ahora.