03 septiembre 2009

El Consejo de la Guardia Civil

El día 22 de enero de este año se celebraron las elecciones constitutivas del Consejo de la Guardia Civil. Por tal motivo y a la vista del resultado electoral cosechado por AUGC, elaboré un informe que remití a la Junta Directiva Nacional de la organización y a su secretario general, Alberto Moya.

Desconozco qué se hizo de él o si sirvió para algo y no tengo constancia de que se distribuyera al resto de la Asociación, aunque sí me consta que algunos de los gráficos que incluye el informe fueron utilizados en las publicaciones de AUGC, aunque sin citar a su autor; pero eso es lo de menos.

Por si pudiera tener más provecho del que tuvo en su día, cuando se lo envié a los dirigentes nacionales de AUGC, y para que todo el mundo conozca mi opinión sobre las elecciones y su resultado, lo he subido a internet. Se puede descargar pinchando en este enlace: http://www.4shared.com/file/129914537/32ac1d59/INFORME_RESULTADOS_ELECTORALES_CGC_2009_v02.html

En el año 2002, cuando participamos en las elecciones al Consejo Asesor de Personal de la Guardia Civil, lo hicimos con todas las reservas y aunque participamos en aquel órgano lo mejor que pudimos y supimos, pronto quedó de manifiesto que iba a servir de poco y que nos tomaban el pelo. En previsión de ello, AUGC reforzó su estructura y no apostamos excesivamente por el Consejo Asesor.

Tengo la impresión de que ahora ha sucedido justamente todo lo contrario: la organización parece tener todo su capital apostado en el Consejo de la Guardia Civil. Los 9 vocales de AUGC ahora están liberados, pero el conjunto de la Asociación desconoce a qué se dedican o en qué están trabajando todos y cada uno de ellos para lograr mejorar las condiciones de trabajo de los guardias civiles. En qué comisiones participan, los documentos que elaboran, las propuestas que hacen… Toda la fuerza de AUGC parece depender de 9 personas, de las que poco sabemos. Todo apostado por el Consejo de la Guardia Civil. Pero ¿y si acaba por ser otra tomadura de pelo y no sirve de nada? Parece más que dudoso que ahora, como se hizo en el año 2004, los vocales del Consejo de la Guardia Civil, llegado el caso, estén dispuestos a presentar su dimisión en bloque para deslegitimar el Consejo.

Por ejemplo, el común de miembros de la organización desconoce los datos que según el artículo 54.3 de la Ley Orgánica 11/2007 deben recibir los vocales del Consejo, esto es, conocer las estadísticas trimestrales sobre el índice de absentismo y sus causas, sobre los accidentes en acto de servicio y enfermedades profesionales y sus consecuencias, sobre los índices de siniestralidad, así como los estudios periódicos o específicos que se realicen sobre condiciones de trabajo. No sabemos si se están recibiendo estos datos, y si no se están recibiendo, el motivo por el cual se incumple la Ley. Pero tampoco nos consta que los vocales de AUGC los estén reclamando. En general no sabemos nada, ni siquiera cuando se reúnen.

Creo que los 9 vocales deben informar con claridad de su trabajo en el Consejo, ahora que disponen de horas de servicio para desempeñarlo. Y más que de su trabajo, de los resultados de su trabajo. Y creo que no hay que jugar todas las bazas a una sola carta, porque en caso de que salga mal, el estropicio será considerable. Esta política que se ha emprendido ahora es justamente la contraria de la que se ejecutó entre 2002 y 2004, y alguien debiera explicar los motivos que han aconsejado este brusco cambio de rumbo.

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Veo que realmente vas entendiendo en qué terreno se está jugando el futuro de los guardias civiles y de las asociaciones profesionales, y al fin captas dónde está el error, la compra-venta de almas y el terrible silencio que nos acompaña desde el 22 de enero.

Un saludo, joan miquel.

Anónimo dijo...

Solo el rencor, la envidia y la nostalgia te está llevando a criticar a la organización que de forma democrática te apartó de la Secretaría General por entender que eras dañino para la AUGC, deja de hacer daño y espero que tu jubilación, si llega, o tu vuelta al trabajo, te llegue con la normalidad mental que necesitas.
Además creo que al final acabarás haciendote daño a ti mismo con estas críticas a tu organización.
Deja trabajar a la nueva Junta que en las asambleas es donde se aprueba o no su trabajo, el tuyo teminó por no aprobarse y veras que no pasa nada con los cambios que ha habido y los quedan por haber.
Entiendo que lo borres pero con que lo leas tu será más que suficiente.

Juan A. García

Anónimo dijo...

¿Que era dañino? Es verdad. Dañino para los generales. Eso es lo que opinan los mandos, no los guardias. Y por lo visto tambien los dirigente de la asociación. Los que hay ahora son unos pelotas de mierda y unos vendidos. ¿Donde esta la asociación? Ya no hay asociación porque se la han cargado.

Perpi, sigue como siempre, diciendo las verdades por más que les joda. Ánimo y adelante. Tu si que estás con los guardias civiles, no como estos que solo miran por lo suyo particular. Traidores.

Anónimo dijo...

Los que hay ahora nos han vendido a todos a cambio de no trabajar ellos. Muchas reuniones pero los de abajo seguimos como siempre de jodidos.

Anónimo dijo...

Es realmente penoso que ante un comentario que en realidad solo pide claridad, alguien salga a decir "cállate", como si pedir claridad fuese un pecado. ¡Viva la democracia!.

Tú si eres dañino Juan A. García, porque sin argumentar nada, intentas desacreditar a quien solo pide un poco de claridad, y lo haces sin argumentos, solo con el insulto gratuito. Cuentanos tú que es lo que hacen los miembros del consejo, (que no la JDN, creo que confundes los términos, ¿porqué será?), y a lo mejor entonces te creeremos y no pensaremos que eres uno de los "vendidos".

suso dijo...

Juan A. Garcia...
Solo la codicia, la irresponsabilidad y la sumisión os está llevando a enterrar una Organización en la que pensé que algún día sería un Sindicato. Creo que una crítica no hace daño, sin embargo una ADULACION (por no llamarlo de otra forma)por parte de algunos dirigentes de AUGC hacia políticos y generales afecta a la normalidad mental de cualquier trabajador, incluso de los jubilados.
Bastante teneis con vetar el acceso a foros para que mandeis callar al que os critica hasta en su propio blog.
Por cierto Joan Miquel, yo no hubiera entendido que vetases una crítica hacia ti y confio en que publicarás lo bueno y lo malo.
Saludos
Suso

Anónimo dijo...

Ni el rencor que demostrasteis traicionandole, ni la envidia por quien os puede dar papas en cuestiones sindicales, y ni la nostalgia por perder a alguien con cojones, será jamás suficiente para que los guardias civiles dejen de pensar en AUGC como una organización que en la actualidad solo aparece cuando Rubalcaba toca la corneta.
Vendidos al Consejo de la G.C.

Anónimo dijo...

¿No seras tu Juan A. García, el que se desvivía no hace mucho tiempo con aquello de "queremos saber"?.
Ahora parece que el que se pregunte por el qué se está haciendo te molesta, incluso al que pregunta lo tachas de rencoroso, envidioso y nostálgico.
Anda, vete a tu delegación y prepara el juego de sábanas y el sillón por si algún vendido se acerca por la capital a tomarse los cubatas con el delfin de Rubalcaba.
Vendidos.

elraton88 dijo...

Yo creo que no hay que ser, tan alarmista, ni por una parte ni por otra. Hemos tenidos momentos bueno y momentos malos, las corrientes críticas siempre han existido dentro de cualquier organización, y debemos utilizar estas críticas para avanzar, por otro lado tampoco es bueno quedarse parados, somos muchos los militantes que esperamos mas de nuestros dirigentes, pedimos valentía e información de lo que se está haciendo en el Consejo, hay que dar tiempo, pero sin dejar de pensar, que el tiempo nos puede sepultar también. Hay que estar preparados para volver a Madrid.
A Joan Miquel le diría que no cambies

Joan Miquel Perpinyà dijo...

Juan A. García Momblona,

Créeme, ni envidia ni rencor ni muchísimo menos, nostálgia. Mucha pena y bastante asco por ver cómo se tira por la borda tanto esfuerzo, tantos sacrificios asumidos por tanta gente durante tanto tiempo. Obviamente, no hablo de ti, claro está.

La descalificación a quienes ejercen la crítica es el recurso fácil. Lo más difícil es rebatir los argumentos y parece claro que sólo te has molestado en aquello, en descalificar y no en responder a los interrogantes que legítimamente planteo en mi artículo. Rencoroso, envidioso, nostálgico, dañino, anormal mental… todas esas descalificaciones se desprenden expresa o tácitamente de tu comentario, pero no te has molestado en rebatir mis argumentos.

Las críticas, o se asumen o se contraargumentan, pero no se descalifica y mucho menos se amenaza a quien las hace. Muchos menos, si quien la hace está tan legitimado a hacerla como lo estoy yo. Sin duda, mucho más que tú mismo, por ejemplo, de quién no conocemos que haya sacrificado nada en esta lucha, más allá de la vergüenza que seguro debiste sentir al condecorar a un diputado del PSOE, tras habernos sancionado por la concentración del 20 de enero de 2007. O cuando en la última asamblea general de AUGC recibísteis en pie y humillados, entre aplausos y ovaciones al director general.

No creo que con la crítica pueda causar daño alguno. ¿Desde cuando la crítica hace daño? Sólo si se fundamenta en argumentos falsos. Y la que yo hago, no lo es, sencillamente porque nadie la refuta.

Reitero mis argumentos y mis interrogantes. Se pueden leer y están firmados. Ya sabéis que yo no firmo nada sin leerlo previamente, a diferencia de algunos.

Terminas con una amenaza propia de un matón de la peor calaña: “Además creo que al final acabarás haciéndote daño a ti mismo con estas críticas a tu organización”. En primer lugar, debo decir que yo no critico a mi organización, critico a los dirigentes actuales y a los vocales del Consejo. Cometes un grave error al identificar la organización con sus dirigentes, porque no son la misma cosa. Cuando se confunden ambas cosas, es un síntoma muy preocupante de que las cosas no van nada bien.
En segundo lugar, debes saber, que nunca me preocupó excesivamente el daño que yo pudiera sufrir por hacer en cada momento lo que considero mi deber, o por ejercer mis derechos. Si lo hubiera hecho, desde luego no hubiese hecho jamás lo que hice como secretario general. Hubiera hecho lo mismo que hacéis los que dirigís la asociación ahora: nada de nada. Nunca he temido las amenazas y los que las hacen, simplemente me repugnan.

Siendo yo secretario general, salimos a la calle y nos manifestamos de uniforme. Obligamos al Gobierno a tramitar dos leyes vitales para nosotros. Por ello fui suspendido 12 meses de empleo y sueldo y he perdido 1 año de mi antigüedad en la Guardia Civil. ¿En qué fracasé? Te lo voy a decir: en nada. Mi peor delito: no plegarme a las exigencias del Gobierno y del PSOE, como la caterva de corderos que ahora dirigen AUGC, incluyéndote a ti, por supuesto. Poner esto de manifiesto significa ser tachado de “dañino” y ser amenazado por escrito hasta por el mismísimo secretario general de AUGC…

Refuta mis argumentos o asúmelos. Pero no me amenaces. ¿Tan bajo ha caído esta organización que hasta os atrevéis a amenazar a alguien que negoció para que ahora estén liberados únicamente los vocales del Consejo? Ver para creer.

Por cierto, aprovecho tu intervención para rogarte que expliques públicamente a todos los compañeros que nos leen qué debe hacerse para estar al frente de una delegación sin que haya habido elecciones democráticas, como sucede en Madrid… Es por eso que no puedo aceptar lecciones de democracia ni de ti ni de ninguno de los cobardes y pelotas que te acompaña.